¿Hay un nuevo viagra? ¿Es esta la generación de la Viagra? Buscamos respuestas y opiniones en la Red…
¿Es esta la generación de viagra?
Viagra es el nombre comercial de un medicamento cuyo ingrediente activo es el sildenafil y está indicado para personas con disfunción eréctil, es decir, una condición médica. Por tanto, debe utilizarse con prudencia, bajo la supervisión de un médico tras un diagnóstico individual. Cenforce Espana funciona dilatando los vasos sanguíneos. Los expertos del Servicio de Salud del Reino Unido afirman que, después de tomarlo, el flujo de sangre al pene aumenta temporalmente cuando un hombre se excita sexualmente.
Además, el sildenafilo tiene otro uso menos conocido, ya que también se utiliza como tratamiento de la hipertensión pulmonar, una enfermedad de muy mal pronóstico. Dilata los vasos sanguíneos en la cavidad torácica, aumentando el flujo de sangre a los pulmones y reduciendo la carga de trabajo del corazón.
Cuando se utiliza para combatir la disfunción eréctil, cabe señalar que el tiempo de dosificación es entre media hora y tres horas antes de la relación sexual y que la pastilla debe tomarse con agua.
Los efectos ocurren alrededor de 30 minutos a una hora después de la ingestión y duran de 3 a 5 horas. También hay que aclarar que la dosis recomendada es entre 25 y 50 miligramos. La dosis diaria máxima es de 100 miligramos y nunca debe excederse.
No se debe tomar si se ha estado bebiendo alcohol, o se tiene un cambio en la presión arterial, problemas hepáticos o renales, ciertas afecciones cardíacas, se es alérgico al sildenafil, o se tienen problemas graves de la vista.
Laboratorios Pfizer fue quien emitió la patente, pero actualmente el principio activo se puede adquirir de otras marcas. Asimismo, resulta que no se debe tomar al ingerir alimentos con alto contenido graso.
Como cualquier medicamento, puede tener efectos secundarios. Así, hay que precisar que pueden presentarse cefaleas, rubefacción, entumecimiento de las extremidades, dispepsia, visión borrosa, erupciones cutáneas, fotofobia y palpitaciones. Y en casos muy raros, también pueden presentarse arritmias cardíacas, infarto de miocardio y pérdida de audición.
En nuestro país, actualmente la venta de Viagra original es de unas 133.000 cajas al año, de las que Pfizer recauda 6 millones de euros. Las cajas de cuatro se venden por 58,85 y las de ocho por 108,9 euros. Las versiones genéricas cuestan la mitad del precio. De hecho, las versiones regulares vendieron 1,3 millones de cajas en 2016, con unas ventas de 22 millones.
Los precios han subido a medida que crece el éxito
Los principales competidores de Viagra son Levitra y Cialis en el mercado estadounidense. Las primeras versiones genéricas llegaron a Europa en junio de 2013 ya Estados Unidos hace ya unos años. Las ventas de Viagra rondan cada año los 2.100 millones. De hecho, la píldora azul también se ve como un ejemplo de hasta dónde puede llegar la codicia de las grandes compañías farmacéuticas. Solo hay que mirar el precio… Viagra costaba $15 por pastilla cuando salió a la venta por primera vez. De ahí subió a $50, sin una sola razón que justificara el aumento. La versión genérica costaría un dólar y Pfizer intentaría venderla en el Reino Unido sin receta médica.
A pesar de su popularidad, Viagra y sus derivados siguen siendo una píldora mal entendida. No es un afrodisíaco y una erección que alcanza los 27 minutos después de tomarla no alterará la pérdida de deseo sexual de la pareja. El tratamiento también se usa en muchos casos para cosas no especificadas en una receta, como la mejora del rendimiento en el comportamiento sexual y en los deportes.
También existe una versión para las mujeres que han perdido el deseo sexual, llamada Addyi y apodada por los medios como “Viagra Femenina”. La FDA la aprobó en 2015. Sin embargo, la píldora rosa no llamó la atención y su eficacia era cuestionable, sin mencionar la larga lista de contraindicaciones que tenía el fármaco.
Cuenta la leyenda que Alexander Fleming estaba comiendo un sándwich en su laboratorio mientras estudiaba bacterias en 1928. Unos días después se dio cuenta de que un moho sucio había matado todas las bacterias y en su lugar desinfectó el laboratorio. Experimento, decidió estudiar este moho y descubrió lo que ahora se conoce como penicilina, el primer antibiótico de la historia.
Y tal como sucedió con Fleming con la penicilina, también sucedió con Viagra, que desde que se comercializó en Estados Unidos por iniciativa de los laboratorios Pfizer en marzo de 1998, ha causado una gran revolución en la vida sexual. Originalmente fue desarrollado por científicos británicos y luego comercializado por la compañía farmacéutica Pfizer.
La farmacéutica Pfizer estaba buscando un fármaco para mejorar la circulación sanguínea en personas con angina, un trastorno del sistema cardíaco que afecta a los vasos sanguíneos del corazón, provocando que no bombeen suficiente sangre y, por tanto, afecta a las extremidades y al resto del cuerpo. Esto les llevó a un descubrimiento que no esperaban, pero que les ha venido como “anillo al dedo”.
En 1993, se realizó el primer ensayo clínico diseñado para desarrollar la farmacología del Sildenafil como tratamiento para la disfunción eréctil. El éxito comercial masivo de Viagra fue evidente cuando las ventas alcanzaron los mil millones de dólares en su primer año, lo que refleja el enorme impacto que ha tenido en la sociedad.
¿Cuál es el efecto y quién puede usarlo?
Así es que sí, podemos afirmar que estas, no esta, son las generaciones del viagra. Tener una erección solo doce minutos después de tomar la pastilla es la causa. Y el efecto es que, aunque mucha gente piensa que tener una disfunción eréctil es cosa de mayores, la verdad es que afecta a una gran parte de los hombres, y por ello, la pastilla es todo un éxito.
Obvio que si se es alérgico al sildenafilo, si se experimenta dolor en el pecho, mareos o náuseas durante las relaciones sexuales, hay que buscar ayuda médica. Pero esto no suele ocurrir. Claro que Viagra puede causar efectos secundarios, como cualquier otro medicamento, pero los beneficios en las relaciones sexuales son más que evidentes.
