El futuro del jazz se desnuda en A Matter Of Time de Laufey

A Matter Of Time de Laufey incendia el jazz con un giro retro y provocador. El futuro del jazz se desnuda en A Matter Of Time de Laufey

Es septiembre de 2025, y A Matter of Time suena en mis auriculares como si un reloj inmenso —ese de la portada, sensual y retro hasta la médula— marcara la cuenta atrás hacia algo inevitable. No es un simple disco; es un salto al vacío con stilettos y mirada desafiante. Y sí, aquí está Laufey, la islandesa que ya supera a Björk en escuchas, desplegando una obra que parece gritarme al oído: “el jazz también puede ser sexy”.

Lo primero que me atrapa es esa portada, un guiño visual que parece un cuento encarnado en reloj, intoxicante y evocador, casi como si se tratara de una edición exclusiva de Urban Outfitters. No hay duda: ella sabe vender la promesa de que dentro hay más que canciones bonitas. “A Matter of Time” se convierte, desde la primera nota, en un manifiesto disfrazado de álbum.

El golpe de reloj y la bofetada emocional

El arranque con “Clockwork” es un latigazo. Sus armonías recuerdan a Patti Page, pero no es un tributo complaciente, sino un despertador emocional que te sacude sin permiso, como bien señala Retrocrates al analizar su carácter inmediato. No suena retro por capricho, sino porque Laufey logra que ese estilo sea suyo, vivo, urgente.

“Lover Girl” entra ligera, bossa nova juguetona, coqueta. Parece hecha para bailar descalzo en una terraza de verano. Pero enseguida llega “Snow White” y me hunde: ese susurro de inseguridad que se quiebra en un vibrato poderoso, casi streisandiano, un dramatismo que críticos como los de Financial Times y Riff Magazine han celebrado por su intensidad.

“Una Laufey con tacones: retro y feroz”, pienso, y me río porque es exactamente eso: la delicadeza en un guante de seda que esconde un puñetazo.

Mr. Eclectic y el veneno elegante

Pero lo que de verdad me hace levantar la ceja es “Mr. Eclectic”. Desde el título ya es un retrato irónico, un espejo para todos esos personajes que creen impresionar citando a Homero o tocando jazz con aire doctoral. Laufey los despacha con humor cruel: “Bet you think you’re so poetic…”, como recoge Shazam. Es bossa nova con uñas afiladas, ritmo juguetón que esconde una daga.

El Guardian lo resume como “poking fun at men who mansplain classical music to her”, y sí, pero aquí no hay panfleto, hay sátira elegante. Me recuerda más a esas novelas de salón en las que una dama derriba al pedante con una frase cargada de ironía. El resultado es el momento más liberador del disco: música para reírse de los pretenciosos mientras se sigue bailando.

Baladas heridas y orquesta desbordada

Y entonces, cuando creo que el disco ya me lo ha dado todo, aparece “Too Little, Too Late”. Una balada que se viste de drama Rodrigo-style, con un taco lanzado como bofetada lírica en medio de tanta delicadeza. Puro contraste, pura teatralidad. Retrocrates lo destacó como uno de sus giros más sorpresivos.

Luego “Tough Luck” escala todavía más: orquesta, pop-rock, traición. Aquí Laufey no canta, arremete. La cuerda se convierte en látigo, y uno casi puede imaginar la escena de un teatro ardiendo entre luces rojas y doradas. Críticos de Dork han visto aquí la confirmación de su lado más explosivo, un arranque de rabia vestida de glamour.

El crítico de The Needle Drop lo resumió con una imagen demoledora: “como un cuento de Disney con presupuesto infinito”. Exacto. Grandioso, sí, pero con grietas. Porque la belleza aquí no está embalsamada, está rota, viva, con cicatrices.

“Jazz clásico con un corte moderno y descarado”: no hay frase que lo defina mejor.

Una Laufey más humana, más torpe, más sexy

Hace tiempo que su música se asociaba a una perfección pulida, como si siempre estuviera en control. Pero aquí algo cambia. Ella misma lo dice en Financial Times: “I wanted the world to know I’m not always so polite”. Y esa confesión me fascina, porque revela el giro: Laufey no teme mostrarse torpe, rabiosa, imperfecta.

Los críticos hablan de un periodo “transformativo”, un adjetivo elegante para decir que ya no le importa mancharse de barro. En Riff Magazine lo definen como el inicio de una etapa más adulta, menos idealizada. Y es ahí donde el álbum gana fuerza: no en lo impecable, sino en lo visceral.

El eco retrofuturista que queda flotando

No todo son juegos de seducción. “Snow White” habla de belleza distorsionada, “Tough Luck” de traiciones sin disfraz. Bajo las cuerdas brillantes y el barniz pop hay confesiones que duelen. El disco envejece como whisky fuerte: notas dulces en la entrada, pero al final un regusto áspero que no se olvida. Críticos de Norman Records lo comparan con una bebida que gana carácter con cada trago.

Me gusta pensar que este álbum no se escucha, se bebe. Y que cada trago deja más claro que Laufey no es una promesa, sino una certeza.

Ecos de frases y refranes

“Lo bueno, si breve, dos veces bueno”, escribió Baltasar Gracián.
Aquí se cumple lo contrario: lo bueno, si intenso, pide repetición.

“El tiempo es la sustancia de la que estoy hecho”, decía Borges.
Laufey parece responderle: el tiempo también puede sonar a jazz retro con tacones.

¿Final abierto o inicio de algo más grande?

El disco termina, pero no se cierra. Queda flotando la sensación de espejo: un espejo retrofuturista que devuelve nuestra imagen imperfecta, la que siempre intentamos ocultar. En ese reflejo, Laufey sonríe con media mueca, como si supiera algo que nosotros aún no entendemos.

Y me pregunto: ¿es A Matter of Time solo un álbum más, o el aviso de que estamos viendo nacer a una nueva estrella del pop que no tiene miedo de ser demasiado humana? ¿Y si ese reloj de la portada no marca el final, sino la cuenta atrás hacia un futuro en el que el jazz vuelva a ser peligroso?

 

Visitas: 6

Si quieres un post patrocinado en mis webs, un publireportaje, un banner o cualquier otra presencia publcitaria, puedes escribirme con tu propuesta a johnnyzuri@hotmail.com

Deja una respuesta

Previous Story

Juegos eróticos para parejas: secretos ocultos de la intimidad

Next Story

La sensualidad secreta de la INTERFAZ NEURONAL más audaz del mundo

Latest from NEWS - LO MAS NUEVO